26 de febrero de 2011

Pesadillas 4

Las películas de miedo incluyen todo lo que nos gusta: el pavor, la crueldad, las bestias feroces, no afines a los seres humanos (que puede parecer una hipocresía), la lucha entre la bondad y la maldad, el contacto con lo de ultratumba, las influencias misteriosas, las fuerzas supremas. La armonía no nos conmueve tanto como la incertidumbre y el desorden. El encuentro con lo dionisiaco nos proporciona las sensaciones mucho más intensas comparando con pura belleza apolínea. El observador opta por lo primero ya que es lo que lo agita a mayor escala, no siente miedo ante el desconcierto porque no participa en la trama. Así pues sus emociones no las considera negativas. Entre otros fue Kant quien escribía sobre aquella división semejante, indicando la diversidad de los juicios. "Para Kant lo sublime es una sensación estética que experimentamos viendo desde la orilla un barco que se enfrenta con las olas en el pleno océano. Cuando el miedo se une con la excitación y con la consciencia de la vanidad humana. Claramente lo sublime no tiene nada que ver con la situación en la que nos hallamos en el borde. La lucha instintiva por la supervivencia no está relacionada con la contemplación. La perspectiva desde la cual mira el observador condiciona la sensación estética." Ya Mickiewicz (uno de los escritores sobresalientes d la literatura polaca) en una de sus baladas, después de haber descrito un camino oscuro al lado de una iglesia ortodoxa, lúgubre ruedan cabezas, andan cuerpos decapitados, se deslizan fantasmas despegando de la tumba, consta: "quedarse solo en el campo por la noche es lo que me gusta!". En el siglo XVIII nació la novela gótica que sentó la base de este género. Fue ella que desarrollo un ámbito especifico y un ambiente de terror, despertó lo que antes ya había provocado el temor, se enamoro de las fantasmas y los misterios tenebrosos, asegurando emociones extremas en las condiciones seguras y amables, a través de las palabras recurriendo a la imaginación humana, recorriendo un escalofrío agradable del susto momentáneo en la espalda del lector. La novela gótica era un variante de la novela histórica o fantástica, ahora se la considera un género independiente de la literatura popular. "Los autores edificaban sus construcciones novelísticas en el plano de la composición de los antiguos libros de caballería y de aventura en el cual el papel más importante desempeñaba el amor entre una pareja, expuesta a las pruebas difíciles en el marco de la lucha contra la maldad, su psicopatología y en los enfrentamientos con los perseguidores sadísticos, violentos y oscuros, la gente inmoral que tiende a caer en la locura y sufre por el desdoblamiento de personalidad. Con los criminales cuya psíquica, aunque enemiga, desmantelaba las compuestas capas del interior humano. A principios del siglo XIX aparecen las obras sobresalientes de Edgar Allan Poe, surrealistas, abundantes de la macabra, las descripciones brutales, repletas del ambiente terrorífico. La mitad del siglo da a luz el simbolismo transcendente. El romanticismo desciende las fantasmas multiplicadas y la irrealidad. A caballo entre siglos el modernismo presenta la imagen de la vida humana llena del sufrimiento y insensata. En el campo tan desesperante, abundante de emociones y misterios, pesimista, lúgubre y cruel crecieron los cuentos de horror que aparecieron en el cine paralelamente con las primeras películas y a lo largo de las décadas consecutivas aterraban ya no solo desde las páginas sino también desde la pantalla, desarrollándose junto con las nuevas fobias y desplegando el sinfín de la imaginación humana. Especialmente las tres novelas de terror clásicas, procedentes del viraje de los siglos tales como Frankenstein, Dracula, Dr Jekyll y Mr Hyde siguen reverdeciendo en distintas películas de miedo contemporáneas y de este modo forman casi tres diversas categorías.

Frankenstein pregunta por la esencia de la humanidad y también por el limite de los experimentos cientificos, por los juegos con la vida y la muerte. Es una novela todavía actual, podemos decir que cada vez es mas actual. La angustia en las injerencias del hombre en la naturaleza refleja, entre todas, una película de miedo Godsend, en la que conyuges jovenes piden por revivir su querido niño (que tenia ocho anos cuando murió) a un medico especializado en clonar células de plantas (su papel interpreto Robert De Niro, como siempre infalible). Su hijo vuelve a nacer y es igual a su antecesor no obstante en la edad en la que el otro niño acabo su vida, empieza a mencionar otro chico, tiene sueños raros y visiones extrañas, su comportamiento cambia y la pesadilla se convierte en la realidad. Godsend es una película que nos llama al orden, hace darnos cuenta de que nuestras posibilidades son restringidas, es un voto contra la clonación, un voto muy sugestivo. Obviamente, Frankenstein también ha estado rodado. Hay que mentar que a esa película aluden no solo las películas de miedo sino tambien Eduardo Manostijeras de Tim Burton, una obra bella, encantadora, conmovedora y fabulosa. Sin embargo el destino del creador de Eduardo no es producir un monstruo sino un amigo. Lo "equipo" con un corazón y le leía cuentos. La gente es la que le hace a Eduardo, que se diferencia de otros, un monstruo y de una manera muy cruel destruye su vida. No el extraño es aquí la persona mala sino la gente que le observa: gente educada y normal.
Robert Luis Stevenson abordo el tema de la enfermedad mental, la cuestión últimamente tocada muchas veces. Por el desdoblamiento de personalidad sufren los protagonistas de las películas como El escondite, Una mirada a la oscuridad, Repulsión, La ventana secreta, Identidad, Birdy. En la enfermedad psíquica están basadas muchas películas de terror, entre todos una de las más geniales: El resplandor.
Drácula abrió camino para los vampiros que hoy están de moda más que otros monstruos. Los vampiros, procedentes de creencias folclóricas, enriquecidos y formados (aunque con el paso de tiempo también borrosos) por un montón de títulos que contenían sus nuevos aspectos, son las criaturas que se alimentan con la sangre. El vampiro es más bien la esencia del hombre. Por ejemplo, completamente como el hombre está condenado a atacar para sobrevivir.
He mencionado que hoy en día los vampiros son los monstruos más populares. Quiero decir: ''filmados" porque como las películas y las series de tele llegan al círculo de los "consumidores'' más extenso y como por motivos del coste de una producción, seria insensible preparar algo a que nadie quiere ver, de que no hay demanda. Una revista polaca "Film" del noviembre del ano 2009 creó una tabla de las bestias de la pantalla. Hasta ahora los vampiros han estado tomados 643 veces. Mas películas, 1074, se han rodado solo sobre los espíritus. Los extraterrestres han aparecido en los cines 615 veces, los hombres lobos 187, los zombis 559, los ciborgs 111, los robots 310, los payasos mortíferos solo 18 veces.

La Mente Siniestra



Trailer: El Resplandidor




Paulina

9 de febrero de 2011

Pesadillas 3




Aunque se puede distinguir varias estructuras de las películas de miedo, todas se parecen por un rasgo, aparte de la lucha con el monstruo lo más frecuente es que supongan una serie de pensamientos, la búsqueda de las pruebas que confirman su existencia y un análisis a fondo. "De hecho la finalidad de tales obras es demonstrar el devenir de algo ajeno en lo conocido y la fuente de su carácter seductor. "1 Se descubre y revela lo que en realidad no existe. De ahí que los hechos hasta ahora evidentes hayan de ser revalorizados. La incredulidad y la percepción restringida de lo que es contrario a la naturaleza de ningún modo facilita resolver los problemas ni prestar ayuda. Es muy usual que la postura negativa ante los fenómenos paranormales que pone en tela de juicio la credibilidad de las fantasmas caracterice aquellos protagonistas a los que desde la perspectiva de nuestra butaca no somos capaces de comprender. Por lo tanto las estructuras más comunes de este género cinematográfico son la estructura de descubrir y de destructor. La Primera de ellas presenta una situación en la que los personajes no conocen el origen de los acontecimientos extraños que los rodean y paso a paso van descubriendo el autor de aquel estrago. Por otra parte es el propio destructor quien despierta unas emociones malas anhelando el poder prohibido y misterioso. Sentimos mucho interés por descubrir lo oculto y por conocer lo inexistente. Y aunque a la hora del enfrentamiento que siempre surge no es nada más que la lucha por supervivencia del ser humano, es el proceso conducente al saber que constituye un elemento seductor que nos atrae en frente de la pantalla con la intención de volver a desvelar el enigma de los impulsos que invaden de repente y de forma inesperada el mundo de los pensamientos y de lo cotidiano de cada uno de nosotros.

La película de terror es en gran medida el reflejo de nuestros deseos humanos. Desde los tiempos más remotos las gentes, incluso enteras sociedades, dan crédito a las fuerzas sobrenaturales. De ahí la buscada de los factores más influyentes y difíciles de dominar sea una de nuestras necesidades primarias. La creencia en una especie del alma del mundo está profundamente arraigada en el interior del ser humano, es una premisa natural que en la vida ilimitada adquiere una ideología que la excluye. Lo oculto, ajeno, misterioso e invisible despierta el espanto. A lo largo de los siglos los símbolos consolidados por la sociedad o simplemente su indiferencia facilitaban la creencia en las fuerzas sobrenaturales, despertaban el interés y mejoraban la memoria. De hecho, al vampiro no lo crearon en el siglo XIX. En la antigüedad los protagonistas intentaban engañar al destino asumiendo una lucha condenada al fracaso en contra de las fuerzas enemigas que determinan la vida humana. Tanto las guerras sangrientas como las epidemias desgastadoras concibieron una imagen de la muerte en forma humana y, una imagen atroz y repugnante. Las enfermedades contagiosas fueron consideradas por ser la consecuencia de la magia y, lo que parece evidente, el grueso de los mitos fue basado en una muerte invencible cercana a todos pero al mismo tiempo tan desconocida e impenetrable. Distintas visiones de ultratumba son una prueba palpable de que a lo largo de los siglos (incluso hasta los días de hoy) la muerte sigue despertando mucho interés entre los seres humanos sobre todo en su aspecto más cruel e impiadoso. A pesar de que nunca nadie había visto a esta mujer asquerosa con una guadaña en la mano, esta fuera imagen con la que se solía asociar a la muerte en la Edad Media (prueba de ello puede ser El diálogo entre el Maestro Policarpo y la Muerte, un poema medieval polaco). Y aunque a la gente honrada le traía un galardón no tenía una apariencia bella, angélica ni benigna. Incluso ya tradición antigua evoca el motivo del descenso al infierno, de los viajes a ultratumba que realizaban los protagonistas de apocalipsis nuevo estamental, así como los personajes de los cuentos barbaros, sobre todo los irlandeses. Siempre nos fascinábamos por la dimensión más oscura de la existencia de ultratumba. Es muy frecuente la comparación entre el cielo y el infierno pero el paraíso, aunque tan deseado, parece menos atractivo que el mundo del dolor y de la angustia, que una hondura misteriosa e impenetrable2. La maldad, tanto como la bondad, viene mano a mano con la naturaleza humana, prueba de lo cual son las innumerables torturas que nacían a lo largo de los siglos. Acabamos creando tal vez más recursos para provocar el dolor que para calmarlo.



Muchas veces las bestias se las identificaban con los animales a los que se les atribuía numerosas intenciones, rasgos y capacidades irracionales. De este modo en el siglo XIV Henri de Ferrieres a la hora de describir el rito de la caza pone de relieve la caza de ciervo otorgándole diez peculiaridades cristológicas y lo contrapone al jabalí (un rival muy exigente y peligroso) asociándolo con los rasgos diabólicos, compara sus colmillos con una horquilla infernal y consta que ''nunca mira el cielo, siempre anda con la cabeza hacia abajo, se pasa el día hozando y sólo piensa de los placeres terrenales, es sucio y se revuelca en el fango, tiene las patas curvadas"3 etc. Incluso la iglesia no animaba a la caza de ciervo considerándolo como algo más noble, controlado que carece de un final sangriento. Así pues cualquier peligro difícil de dominar.

Paulina

1N. Carroll, Filozofia horroru
2J. Le Goff, Świat średniowiecznej wyobraźni
3M. Pastoureau, Średniowieczna gra symboli